Tuesday, September 8, 2009

Dos Caballeros



Había una vez, en un pueblo llamado Gotham, existían dos caballeros: uno Blanco y el otro...Oscuro. En el pueblo, la justicia sólo era un ideal de tontos e ingenuos; los ladrones y asesinos hacían lo que les placían, y los habitantes del pueblo vivían con miedo, temiendo salir solos de noche. Incluso, los oficiales del rey no podían detenerlos; porque a medida que encerraban a uno, algún otro surgía y destruía lo poco que quedaba del Pueblo. Los habitantes estaban desesperados, necesitaban un héroe, alguien que pusiera a los criminales en su sitio; un héroe que los socorriera en su auxilio, y les diera aquella esperanza que soñaban y llamaban en su frágil y dulce delirio; aquella esperanza de la que sostenían a pesar de que nunca llegaba. Hasta que él apareció...el Caballero Oscuro; no era lo que pidieron, pero era lo que necesitaban. El Caballero Oscuro era un hombre sombrío, un justiciero que siempre se presentaba de noche, en su corcel, portando su gran espada, luchando contra la opresión, la injusticia, y los criminales...a su manera...Al mismo tiempo, apareció el Caballero Blanco, y con eso, la esperanza que los pueblerinos habían anhelado siempre; este Caballero, a pesar de que no concordaba en la manera en que el Caballero Oscuro hacía justicia, al menos pensaba que de una forma u otra, el mal se iría..pero no fue así.

Todos pensaron que por fin, la paz se reestablecería, pero sólo fue una ilusión de un sueño olvidado, porque al pueblo llegó un hombre malvado; tan malvado y tan sádico que su sonrisa producía la peor de las pesadillas. Su nombre era The Joker. Era un bufón con un disfraz morado, y en su rostro pintado de blanco, sobresalía una sonrisa anormal, y a su paso, sólo había destrucción, muerte, y su sonrisa macabra que resonaba en todo el pueblo. Su plan consistía en destruir al Caballero Oscuro, pero para llegar a él, tenía que matar al Caballero Blanco; pero no lo mató, sino que lo sucumbió en la oscuridad del abismo y lo convirtió en aquello por lo que este luchaba para que no surgiera: en un hombre de dos Caras, un hombre que decidía la suerte de los demás. Al darse cuenta de lo sucedido, el Caballero Oscuro decidió actuar, y rápidamente, pudo encarcerlar The Joker, no sin antes, decirle que no era como los demás, a pesar de que sí quería serlo.

Aunque haya pasado algunos años, el Caballero Oscuro sigue rondando, vigilando, esperando que algún otro aparezca y él devuelva la paz de la noche...aunque a veces, muy dentro de su corazón, algún día se dará cuenta de que pronto, otro Caballero vendrá, y él tendrá que descansar....